
Hace casi dos años que no he escrito en mi blog. Bienvenida imperfección y autenticidad.
Las circunstancias laborales me impidieron tener un foco de luz para volver a inspirarme.
Tras días de niebla vuelve a salir el sol.
Durante muchos años trabajé en una empresa industrial en la cual me dio el ímpetu y las ganas de aprender.
Esa curiosidad en aprender en el mundo empresarial o en el foco del cliente me ayudaron a entender la importancia del servicio a las personas.
Muchas veces he hablado de mi padre. Tuve un gran pilar, un gran ejemplo de laboriosidad, donde el rigor y la resiliencia fueron sus constantes. Hoy a sus 94 años sigue enseñándome en el camino de la rectitud y buen hacer. Se que soy una afortunada junto a mi madre y mis hermanos, cuñados, sobrinos, marido e hijos el poder aún tomar de su mano y con toda lucidez escucharle sabios consejos.
En la actualidad me encuentro dirigiendo una pyme con un gran equipo de nueve personas. Desde aquí quiero dar las gracias a mis nuevos superiores por la confianza depositada.
Desde marzo del 2020 mi vida profesional ha dado un gran vuelco. Donde la gestión es constante día a día y tomar buenas decisiones a corto y largo plazo. Intentando inspirarme en mi equipo y mucha otra gente de gran valía para remar todos juntos en la misma dirección.
En muchos posts de Linkedin se habla mucho sobre ser buenos directivos y ser buenos líderes.
La vida está llena de disyuntivas. Puedes ser jefe o ser líder. Se parece, pero no es lo mismo. Escalar en la sencillez según diría Xavier Marcet. Lo sencillo se alimenta de una suma de profundidad y autenticidad.
Con que facilidad se habla de ello y cuan difícil es saber gestionar las empresas y las personas que trabajan en ella. Cuando se emprende desde cero depositas la confianza y esperanza de que las tareas vayan fluyendo dando cada uno lo mejor de si.
Hace poco una persona a la que conocí, me comentó que no leía publicaciones mías desde Linkedin, ¿será el algoritmo?, preguntó. Su sinceridad me hizo pensar en volver a rebrotar mi capacidad de comunicar con total transparencia.
Una publicación de Joan Clotet fué un maravilloso escrito inspirador.

La única pantalla que nos muestra la verdad es un espejo. Al despertar sin maquillaje y al final de un día más.
En una vida digital de apariencias, postureo y maquillaje digital, no faltar a nuestra cita diaria con la verdad que nos mantiene conscientes y humanos.
Autenticidad en estado puro.
Desde este post me he propuesto a compartir conocimiento, experiencias y momentos porque si es compartida la vida es un plus.
Como diría Victor Küppers
En momentos de dificultades, problemas, momentos durísimos hay que sacar nuestra mejor versión.
Ante la incertidubre ser capaz de elegir la mejor actitud.
Dejar de darle vueltas a aquello que no controlamos. Pensar y preguntarnos ¿y yo que puedo hacer?
Necesitamos ser valientes con coraje. Di si a la valentía. ¿Te animas?